Fútbol argentino. Algunos acuerdos sin dirimir posicionamientos y las huellas del macrismo en Boca y Ríver

Osvaldo Riganti—

Sueño de lluvia bendita

Mientras corre el mes y se delinea esta nota todavía no se han acomodado las piezas en el fútbol argentino,

Hubo algunos acuerdos. El arribo de la Superliga al fútbol argentino ha sido admitido y debido a ello el campeonato principal se iniciará el 19 de agosto, con 30 equipos. Habrá 4 descensos y 2 ascensos.

Nicolás Russo, presidente de Lanús, un club que luce predicamento futbolístico (reciente campeón) y ascendente dimensión social, tiene aspiraciones a conducir la entidad madre de nuestro fútbol. Se mantiene en sus trece: “No queremos las Sociedades Anónimas porque creemos en los clubes en manos de los socios”, dice en Página 12 del 5 de julio, pero remarca que se fortalezcan los controles. No le parece mala idea la de la Superliga, aunque cree que “hubiera sido mejor en otro contexto”.

Lo evidente es que el Estado parece seguir aportando. La flamante creación “arranca con un aporte estatal de casi 2.500 millones” apunta “Mundo D”.

La revista “Veintitrés” del 14 de julio de 2016 da cifras más precisas: “La Superliga tendría en sus arcas en su primer año de vida 2.437 millones de pesos, pero habrá que pagarles algo de dinero a los clubes del ascenso, quienes para aprobar la nueva estructura pidieron parte de la torta”. La repartija establece que River y Boca se llevaran 98 millones cada uno, que Independiente Racing y Velez 74 millones y los restantes clubes 56.

Pablo Abbatangelo es nieto del que fuera presidente de Boca, Camilo Cichero, un hombre que hipotecó la casa para llevar adelante la Bombonera y donde hoy vive el nieto, que es arquitecto y hace más de tres décadas brindó al club sus servicios profesionales en forma gratuita para reconstruir la cancha. Hoy, como Secretario del Foro Social del Deporte, deja sentadas sus dudas: “Presentan como panaceas experiencias foráneas, producto de otras realidades, exaltando dudosos resultados económico-financieros con el viaje exprés de un CEO que no tiene  la menor idea de lo que sucede por estos lares con el deporte más popular, sus clubes centenarios y toda la función social, cultural y deportiva no profesional que en ellos se desarrolla”. Más adelante subraya que “El desconcierto de propios y extraños es lo que rodea a Cambiemos en todos los órdenes de gobierno y el fútbol pareciera no ser la excepción” En  sintonía con Russo define: “Los clubes en mano de sus socios y la AFA en manos de los clubes es lo que propiciamos desde nuestro Foro. La pasión futbolera nacional le pertenece a los 40 millones  de argentinos y  los clubes ya tienen como únicos y verdaderos dueños a sus socios”. Posiciones similares también afloran desde la vereda del tradicional rival boquense. “Decir que las S.A. son sinónimo de transparencia es una mentira del neoliberalismo”, dice el presidente de la Comisión Fiscalizadora de River Plate, doctor Carlos Lancioni en el último número de la publicación partidaria “Siempre River” que dirige Patricio De Francesco.

Precisamente en River Plate las agrupaciones que dan sustento a su vida política institucional se han pronunciado en forma unánime rechazando la figura de las S.A. en el fútbol argentino y solicitaron a las autoridades que se pronuncien en forma oficial de manera similar. Sin embargo la Comisión Directiva sólo se limitó a tomar nota. Por eso las agrupaciones han vuelto a la carga para que D´Onofrio y sus pares deriven el tema a la Asamblea a fin de que esta defina legalmente la posición.

Quienes conocen la trastienda en el club de Núñez dicen que la agrupación Nuevos Dirigentes fue la última en suscribir el pronunciamiento y que habría sido algo reticente. La agrupación responde a los hermanos Santilli, hijos del histórico Presidente Campeón del Mundo. O sea, Diego Santilli, actual vicejefe de Gobierno porteño y Darío Santilli, presidente de la Asamblea de Representantes de River Plate. El nucleamiento es hoy presidido por Agustín Forchieri, legislador de la Ciudad por el PRO.

Muchas voces coincidieron en censurar manifestaciones de Forchieri a poco de ganar las elecciones en River Plate su hoy presidente D´Onofrio. “D´Onofrio representa la filosofía PRO” expresó en la revista “Noticias Urbanas” de Diciembre de 2013. Más arriesgado aún llegó a cavilar: “Ganamos las elecciones al estilo PRO”. Una marea humana que en número de casi 20 mil socios se volcó a las urnas para sepultar al régimen de Passarella parece dar a entender lo contrario. Aparte el presidente D´Onofrio aparece vinculado al ex candidato a gobernador Domínguez y ha hecho firmes manifestaciones en defensa de la causa de los Derechos Humanos. Pero Forchieri fue más allá y en esa publicación llegó a decir que a veces le daba tristeza cuando Boca perdía, atento a que su jefe, Mauricio Macri, eso lo consternaba.

Forchieri es representante de socios y ante el tenor de sus manifestaciones que se consideraron poco prudentes y lindando con lo anti estatutario, el ex presidente Aguilar (que fue decisivo para abortar hace una década y media la conversión de clubes como sociedades anónimas que entonces impulsaban Menem desde la presidencia de la República y Macri desde la de Boca), señaló: “Debería ser sumariado y suspendido en la Asamblea”.

El jefe y el bendecido

Si bien no se han dirimido los posicionamientos en la entidad madre del fútbol, más allá de los acuerdos a que parecen haber llegado, todo indica que Angelici es quien conduce detrás del trono.“El presidente de Boca gobierna sin ocupar el sillón de Grondona. Hace y deshace en medio de la profunda crisis que atraviesa la AFA” apunta Gustavo Veiga en Página12 del 10 de julio. “Todo lo hace con su proverbial estilo de patrón de estancia. Es hombre de máxima confianza de dos presidentes  sudamericanos” señala y cita al argentino Mauricio Macri y al paraguayo Horacio Cartes, “de quien Angelici se dice su socio”.

La publicación pone de manifiesto también la vinculación de Angelici con Jorge Antonio Gallitis, cuestionado porque le cambiaba a los clubes cheques a tasas que rondaban el 40%. Es sabido que ambos también comparten otros negocios y desmanejos en AFA, que también afectan a Boca, donde el macrismo opera con mayor soltura aún que en su clásico oponente. “Una desgracia llamada Angelici” titula “El Blog del Hincha de Boca”, tras que Independiente del Valle de Ecuador dejara en el camino hacia la Libertadores al club de la Ribera con más contundencia aún que al archirrival.

Las tensiones persisten y los encontronazos están a la orden del día en el vapuleado más popular de los deportes. “Veintitrés”, en una nota del 14 de julio de 2016, da cuenta de que “Macri y Tinelli volvieron a pelearse” “Y eso que hace mucho tiempo fueron casi socios, cuando el ‘Cabezón’ compró las acciones del club español Badajoz y su amigo Mauricio, como mandamás de Boca, le prestó algunos jugadores del club argentino. Eran otros tiempos”, cierra su artículo el semanario.

Son todos datos de distinta procedencia de un rompecabezas que sigue apareciendo complejo.

Al cierre de esta nota se conocían los integrantes de la Comisión Normalizadora designada. La encabezará Armando Pérez, presidente de Belgrano de Córdoba, acompañado por Pablo Toviggino (presidente del Consejo Federal) y los abogados Javier Medin (representante legal de Boca en tiempos de Macri) y Carolina Cristinziano (pareja de Gonzalo Belloso, ex futbolista, manager de Rosario Central y Director de Desarrollo de la Conmebol).

Según informó la FIFA "El Comité de Regularización podría proponer aumentar el número de miembros hasta un máximo de 3 personas". Dicho comité se encargaría de administrar la actividad diaria de la AFA, revisar sus estatutos para adaptarlos a la última versión de los de la FIFA y organizar elecciones.

Toda una zaga de enigmas y enredos cuyo desenlace aún no se avizora.