lunes, 18 de diciembre de 2017

Con 67 y a modo de hasta siempre.


Habiendo cumplido casi seis años desde que unoytres fue concebida y un poco menos desde que por primera vez vio la luz, el grupo que durante ese tiempo fuimos su núcleo duro y la sostuvimos por las 67 ediciones hemos llegado a la conclusión que, como toda criatura viva —y unoytres lo fue—creció, se desarrolló y completó un ciclo que amerita hacer un alto para reflexionar serenamente sobre su futuro. Desde comienzos de 2012 en que se gestó la idea y mayo de 2012 cuando se asomó por primera vez al mundo, hasta hoy, acumulamos una rica experiencia que nos permitió pasar de las apenas cuarenta entradas registradas en aquel que ahora vemos como remoto mes, hasta arañar las tres mil que promediaron las ediciones de este 2017.
Ese recorrido nos permite realizar un balance satisfactorio sobre esta aventura y llegar a la conclusión de que, estimando el desgaste que ese esfuerzo le demandó a nuestras propias capacidades, vale la pena concedernos una tregua, darle un cierre a esa etapa, haciéndolo por nuestra libre decisión y no porque nos lo impongan los caprichos del tiempo.
A grandes brochazos, una mirada sobre el conjunto de lo producido nos permite sacar la conclusión de que fue y es sumamente valioso y original lo que mes a mes le fuimos entregando a nuestros lectores y que en buena medida pudimos alcanzar uno de los objetivos principales que nos propusimos cuando concebimos unoytres: el de mostrar que en la vida cotidiana de la mayoría de la gente hay un sustrato común de acción solidaria y creativa que, adecuadamente articulada, puede ser la materia prima para enfrentar la cultura egoísta, individualista, la del sálvese quien pueda, que las clases económicamente dominantes muchas veces han logrado imponer como hegemónicas al conjunto de la sociedad. Hacia allí apuntaron las notas que visibilizaron desde las murgas hasta el deporte, en un recorrido por las raíces históricas y populares de muchos clubes del país, hasta rescatando los contrapuntos y rivalidades entre instituciones vecinas del mismo barrio o zona.
Para entender mejor la diversidad del mundo y enriquecer nuestro bagaje cultural buscamos la ayuda del ajedrez, y enancados sobre trebejos, ágilmente recorrimos países e indagamos en sus tradiciones, leyendas y costumbres, algo que de otro modo seguramente nos habría sido muy difícil acceder y lo hicimos sin olvidar que en el trayecto debíamos seguir desafiando mensualmente con problemas a la compacta legión de aficionados que disfrutan de participar de los entreveros que nos propone el juego-ciencia.
La cultura popular, en particular la literatura, en la medida de lo posible, tampoco faltó a la cita. Privilegiando lo nacional, se publicaron entrevistas con escritores, comentarios sobre distintas obras e incluso se hubo también algunos trabajos originales.
Como no podía ser de otro modo, la actualidad política dio el presente en unoytres, sin sacarle nunca el cuerpo a expresar su opinión independiente, constructiva, no partidaria, pero siempre comprometida con el espacio genéricamente llamado nacional, popular y democrático.
La anterior enumeración sólo intenta ser una muy apretada síntesis de estos seis años de trayectoria que cerramos con la actual edición.
También, sin falsa modestia, vale la pena consignar que durante estos años el desafío no nos resultó fácil, pero lo encaramos y creemos haber salido airosos. Además, lo acometimos a puro entusiasmo y pulmón, sin más respaldo económico que nuestros nada rebosantes bolsillos de laburantes y jubilados. Un ejemplo de lo anterior es que nuestra original página web debió superar el ataque de hackers que nos obligó a cambiar el soporte web por el de blog spot y aprender en escasos días un conjunto de aspectos técnicos, que ni de lejos dominábamos, que hasta ese momento y mientras pudo, se los cargó sobre la espalda un amigo que gratuitamente diseñó y sostuvo creativamente la página.
Para cerrar esta enumeración, sólo nos queda agradecer el respaldo de nuestros lectores, apoyo y aliento sin los cuales nada de lo anterior hubiera tenido sentido y con quienes, por eso mismo, además de envolverlos con nuestro abrazo, nos sentimos obligados a darles esta explicación.
Quienes sientan la tentación de preguntarnos sobre a qué nos vamos a dedicar a partir del mes que viene, sólo podemos responderles que ni nosotros aún no lo tenemos decidido, ni claro. Sin embargo, ninguno debe dudar que seguiremos fieles a nuestras trayectorias de militantes por la vida, entre cuyos proyectos nunca existió el de sentarnos a contemplar de brazos cruzados cómo, pasivamente, ella se nos escurre sin dejar rastro.
El equipo de unoytres.

1 comentario:

  1. Muchas gracias por todo Mauricio, sé del esfuerzo que implica llevar adelante un proyecto como "unoytres". Hasta cada momento. Un abrazo sincero. Víctor Domast

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