Bill Gates, Samid y Perón: Su relación con el ajedrez

Por el profesor José Pecora--

Un viejo dicho español dice “Poderoso caballero es Don Dinero” y de eso nadie tiene la menor duda, ya que si bien hay cosas que con el dinero no se pueden lograr, hay muchas que sí son factibles de alcanzar.

Y entre las cosas posibles de realizar tenemos una que se ha producido hace más o menos un mes, que tuvo como protagonistas a Bill Gates, dueño de Microsoft y el hombre más rico del mundo, junto con Magnus Carlsen, actual campeón mundial de ajedrez.

Bill Gates es aficionado al ajedrez y aprovechando la gira que por Estados Unidos estaba realizando el campeón mundial, fue convocado por la televisión para montar un show basado en un enfrentamiento suyo con el campeón mundial en una partida rápida, disponiendo Magnus solamente de 30 segundos, contra 2 minutos para Bill.

Bill Gates es un entusiasta del ajedrez, pero como jugador es bastante flojo, ya que Carlsen, como se puede ver en el video, precisó sólo 9 jugadas y 12 segundos de su tiempo para darle jaque mate.

Sin embargo, como el campeón mundial no es ningún tonto, sus comentarios de la partida y sobre la forma en que jugó Bill fueron sumamente elogiosos.

En nuestro medio, el “pintoresco  personaje” que es el carnicero y actual vicepresidente del Mercado Central, Alberto Samid, fanático del ajedrez, también por “intermedio del dinero” se dio el lujo no sólo de enfrentar a los ex campeones mundiales Anatoly Karpov y Garri Kasparov en partidas amistosas, sino que además cuenta orgulloso que hizo “tablas” con ambos.

Con cada uno de los ex campeones organizó en su momento, una fiesta campera y asado criollo en el restaurant El Mangrullo, de Ezeiza, cerrándolo al público y poniendo él toda la carne, que me imagino que habrá sido de la mejor.

“Es increíble. Para un aficionado como yo, hacer tablas con Karpov y Kasparov… imaginate, estoy muy feliz, realmente. Es un sueño”, confesó Samid

No sólo el dinero hace que aficionados al ajedrez puedan relacionarse con grandes jugadores, sino que también esto puede producirse cuando se trata de personajes famosos, con poder político o  autoridades gubernamentales.

Como ejemplo de un caso de este tipo de celebridades, vamos a citar algunas anécdotas  del ex presidente Juan Domingo Perón, relacionadas con el ajedrez.

Los años 50 podemos decir que fueron la época de oro del ajedrez argentino. El presidente Perón simpatizaba con el ajedrez y le brindó mucho apoyo, al igual que a otros deportes. Argentina en esos años consiguió tres subcampeonatos mundiales en las olimpiadas de Dubrovnik de 1950, Helsinski 1952 y Ámsterdam 1954.

En esos años, éramos una potencia debido a que hubo muchos jugadores extranjeros se quedaron a vivir en Buenos Aires en 1939, al estallar la segunda guerra mundial. Como en nuestra ciudad se estaba disputando el Torneo de las Naciones, la mayoría de los jugadores, ante la imposibilidad de retornar a sus países de origen por el conflicto bélico, optaron por quedarse. Y muchos adoptaron la ciudadanía argentina, por lo que pasaron a representar a nuestro país en los juegos olímpicos que se empezaron a disputar en los años siguientes a la finalización de la guerra.

Fue así que Perón y Eva Perón, recibieron en la casa de gobierno a parte del equipo argentino que había obtenido el subcampeonato mundial en 1950 para felicitar a sus integrantes y de ese encuentro trascendieron algunos detalles muy interesantes. Entre los ajedrecistas que fueron recibidos se encontraban Miguel Najdorf, Héctor Rosetto y Herman Pilnik.

 Rosetto y Najdorf enfrentándose en un encuentro

Herman   Pilnik

A ese encuentro con Perón le debió Najdorf  mucho de lo logrado posteriormente a nivel personal.

Resulta que ese mismo año con motivo de disputarse en Nueva York un importante torneo, Najdorf  había tomado contacto con un importante millonario, dueño de la compañía de seguros Jackson, que hacía seguros de vida en Londres. Este millonario le “regaló” a Najdorf  la franquicia de su empresa para hacer seguros de vida para toda Sudamérica.

Najdorf estaba muy contento con este regalo, pero tenía un grave problema, ya que por la política desarrollada por Perón en materia de nacionalizaciones, todos los seguros había que hacerlos en el país.

Durante el encuentro con Perón y Evita, ésta última les dijo a los jugadores argentinos que pidieran el regalo que quisieran por haber logrado el subcampeonato. Rosetto dijo que necesitaba un departamento donde vivir con su familia, ya que no tenía casa y eso Eva Perón se lo concedió inmediatamente, otorgándole un departamento en Parque Chacabuco de los construidos por el Banco Hipotecario Nacional.

Eva Perón

Cuando le tocó el turno de pedir a Najdorf, éste muy inteligentemente dijo que él no quería pedir nada material, sino que lo que pretendía porque para él iba a ser un gran honor, es la posibilidad de hacerle un seguro de vida a Perón en su empresa.

Como la respuesta también fue afirmativa, Najdorf inmediatamente le hizo el seguro de vida y se lo regaló, y de esa manera, Najdorf dijo que si Perón era su cliente, cualquier otro podía serlo también, con lo cual sin pedirlo directamente, consiguió “el permiso” para hacer seguros de vida en Londres, actividad con la que amasó una interesante fortuna personal.

Todavía faltaba en esa reunión que Pilnik hiciera su pedido a Eva Perón y era bien sabido que éste era un acérrimo antiperonista.

El resto de los allí presentes tenía miedo que hiciera algún desaire, ya que estaban bien seguros que no iba a abandonar sus convicciones.

Pilnik solucionó ese problema elegantemente sin renunciar a sus ideas y sin causar ningún tipo de ofensa. Dijo que ante la belleza de Eva Perón, el mejor premio que podía recibir de ella era un beso.

Otra interesante anécdota sucedió en 1954, en ocasión del match por equipos a 8 tableros que Argentina disputó contra la URSS, en el teatro Nacional Cervantes y que Perón fue a inaugurar.

Najdorf junto a Perón haciendo la jugada inaugural del match

En el primer tablero se enfrentaban Miguel Najdorf por nuestro país contra David Bronstein por la URSS. Perón hizo la primera jugada moviendo el peón rey en el tablero de Najdorf. Se sacaron varias fotos y luego de quedar formalmente inaugurado el match, Perón se retiró de la sala.

Inmediatamente que Perón se fue, Najdorf retrocedió a su casilla inicial al peón rey y movió en su lugar el peón de la dama. Bronstein risueñamente le dijo a Najdorf que cómo era que se atrevía a contradecir de esa manera a su presidente y Najdorf le respondió que “Perón sabe de política más que yo, pero sobre cómo hay que enfrentar a Bronstein yo conozco más que él”

Najdorf solía contar que muchos años después en una oportunidad en la que fue a visitar a Perón en su exilio en España en su casa de Puerta de Hierro y al contarle ésta anécdota, Perón riéndose, le dijo que tenía mucha razón y que había actuado muy bien.