Por el profesor José Pecora—
El ajedrez está
tan difundido y arraigado en todas partes del mundo, que en plazas, parques y
paseos públicos de muchos países existen mesas para que quienes lo deseen lo puedan
practicar. Más que un deporte, su práctica ya forma parte del patrimonio cultural
de los pueblos.
Aficionados disfrutando
de un lindo día y jugando al ajedrez en el Mac Donald park de Quenns
En el famoso Central Park de la ciudad
de Nueva York, se ha construido en 1952 la Chess and Checkers House (Casa del
Ajedrez y Damas), que cuenta con instalaciones adecuadas para la práctica de los
mismos y en su parte exterior tiene 52 mesas de ajedrez para que los
aficionados lo puedan hacer al aire libre, gozando además de la naturaleza.
Casa del Ajedrez
en el Central Park de Nueva York
Vista parcial de
las mesas exteriores de la Chess and Checkers House ubicadas en un bello
entorno natural
A modo ilustrativo, veremos imágenes de
tableros ubicados en lugares públicos de diversos países:
Aficionados
jugando en el parque Sokolniki, en Moscú
Mesas de ajedrez
en el Parque de la encina, en La Zubia, provincia de Granada, en España. El
parque se llama así porque debajo de un viejo árbol de encina, se inspiró para
su obra el famoso músico Manuel de Falla.
Tableros de
Ajedrez en la Plaza de la Paz de Praga
Parque del
ajedrez en Santiago de Cuba
Muchas veces, también se efectúan
torneos en las plazas, como por ejemplo el de Cox, en la región española de
Alicante, o el de la Plaza de Armas, en Santiago de Chile
Torneo de Cox,
en Alicante, España
Torneo en La
Plaza de Armas, Santiago, Chile
En nuestro país
existen mesas para la práctica del ajedrez en plazas y parques de la ciudad de
Buenos Aires y en casi todas las provincias, con muy buena concurrencia de
aficionados. Un caso característico es el del Parque Rivadavia, donde generalmente
se disputan partidas rápidas.
Aparte de las mesas tradicionales para
la práctica del ajedrez, con el fin de atraer la atención del público en general, se han instalado juegos
gigantes en paseos públicos de distintas partes del mundo, que hacen las
delicias de niños y adultos.
Entre los más notables, podemos citar el
de la plaza Max Euwe (Euweplein) en Amsterdam, Holanda, en honor de dicho ex campeón
mundial.
Dr. Max Euwe ex
campeón mundial y ex presidente de la FIDE
Ajedrez gigante,
en la Plaza Max Euwe (campeón mundial de 1935 a 1937), en Amsterdam, Holanda
Otros ejemplos dignos de mención son:
Ajedrez gigante
en Blanes, en la costa brava Española
Aficionados jugando
con grandes piezas en la Ciudad de Melbourne, Australia
Como curiosidad
podemos citar que en Suiza, en todos los parques, zonas de juego y campings,
existen tableros pintados en el suelo, con sus respectivas piezas, siempre
disponibles para quien desee hacer uso de ellas. Son sin duda un ejemplo más de cómo en Suiza las instituciones se preocupan por la
calidad de vida de la gente con detalles como este, aparentemente
insignificantes, pero muy elocuentes.
Tablero de
ajedrez en el parque de los Bastiones en Ginebra, Suiza
En la ciudad de
Buenos Aires, desde 2010 hay dos juegos de ese tipo donados por la embajada de
Alemania al gobierno de la ciudad con motivo del bicentenario.
A
continuación se transcribe la noticia aparecida el 2 de octubre de 2010, en la
revista barrial “El abasto”.
“Nuevo ajedrez gigante en Plaza Alemania.
Ayer, en coincidencia con el día en que se celebra la unificación alemana, inauguraron,
mediante una ceremonia un ajedrez gigante donado por el Gobierno de la
República Federal de Alemania a la Ciudad de Buenos Aires, en conmemoración del
Bicentenario de la Revolución de Mayo de 1810.
El acto –que contó la asistencia del ministro de Cultura del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Hernán Lombardi, y el embajador de la República Federal de Alemania, Günter Kniess- tuvo lugar en la Plaza Alemania, Avenida Del Libertador 2700.
El juego de ajedrez emplazado está compuesto por un tablero de 3,2 metros cuadrados y sus 32 piezas gigantes realizadas en madera teca, una madera especial proveniente de Indonesia que resiste los cambios climáticos y el agua, que fueron confeccionadas especialmente en Alemania. El Rey pesa 6 kilos y mide 60 centímetros de alto.
El Ministerio de Cultura se compromete a organizar actividades, partidas y campeonatos de ajedrez y además podrá ser utilizado por los vecinos y turistas que así lo requieran. Por otro lado la República Federal de Alemania también donó al gobierno porteño otro juego de piezas gigantes que formarán parte de un ajedrez itinerante que recorrerá con distintas actividades, centros culturales, colegios, plazas y parques fomentando la participación en esta disciplina. Seguramente en algún momento pasará ese juego por nuestra Plaza Almagro gracias a tener al Club de Ajedrez Torre Blanca por el barrio.
El acto –que contó la asistencia del ministro de Cultura del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Hernán Lombardi, y el embajador de la República Federal de Alemania, Günter Kniess- tuvo lugar en la Plaza Alemania, Avenida Del Libertador 2700.
El juego de ajedrez emplazado está compuesto por un tablero de 3,2 metros cuadrados y sus 32 piezas gigantes realizadas en madera teca, una madera especial proveniente de Indonesia que resiste los cambios climáticos y el agua, que fueron confeccionadas especialmente en Alemania. El Rey pesa 6 kilos y mide 60 centímetros de alto.
El Ministerio de Cultura se compromete a organizar actividades, partidas y campeonatos de ajedrez y además podrá ser utilizado por los vecinos y turistas que así lo requieran. Por otro lado la República Federal de Alemania también donó al gobierno porteño otro juego de piezas gigantes que formarán parte de un ajedrez itinerante que recorrerá con distintas actividades, centros culturales, colegios, plazas y parques fomentando la participación en esta disciplina. Seguramente en algún momento pasará ese juego por nuestra Plaza Almagro gracias a tener al Club de Ajedrez Torre Blanca por el barrio.
U.K.”
En la foto
siguiente se aprecia a la maestra FIDE Marina Rizzo conduciendo una actividad con
niños en la Plaza Alemania. Al fondo, en el centro se puede ver al ministro de
Cultura de la Ciudad, Hernán Lombardi.
Además, sería interesante, que el ente del Gobierno de la Ciudad encargado de los deportes (Subsecretaría de Deportes) pudiera disponer del mismo, a fin de organizar actividades gratuitas en beneficio de la comunidad.
Profe : se olvidó de nombrar la Plaza del Botanico en la calle Republica Arabe y Siria de caba....jajajaja Un abrazo. Pedro.
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