Macri y sus funcionarios contra la memoria histórica

Mauricio Epsztejn—

Abel Posse

Cuando los mismos conceptos respecto a la última dictadura cívico-militar-eclesiástica se repiten en boca varios funcionarios designados por Mauricio Macri para cargos estatales de alto nivel, está claro que quien eligió a tales personajes lo hizo conociendo sus ideas y las comparte.

En el caso de Macri la afirmación no es antojadiza, sino que se basa en hechos públicos y comprobables, protagonizados por él mismo durante su gobierno en la Ciudad de

Buenos Aires (CABA)

y en el tiempo que lleva al frente del nacional, cuya lista incompleta incluye calificar de “curro de los Derechos Humanos” a la lucha sin tregua que los organismos vienen impulsando desde hace más de cuatro décadas; sus reiterados intentos por vaciar de contenido al 24 de marzo como Día Nacional de la Memoria, por la Verdad y la Justicia; el desfinanciamiento a varios programas que se venían desarrollando en la ex-ESMA; el freno y desmantelamiento de los equipos del Banco Central y la

Darío Lopérfido

Comisión Nacional de Valores que investigaban la participación empresarial en los crímenes de la dictadura; el intento por crear un country en Campo de Mayo para alojar a los genocidas, en lugar de que cumplan sus penas en cárceles comunes; referirse despectivamente al tema de los desaparecidos; haber designado como Ministro de educación de la CABA al fascista Abel Posse, un diplomático que sirvió a las dictaduras de Lanusse y a la última y más tarde las reivindicó; respaldar a Darío Lopérfido por sus dichos sobre los desaparecidos y la ofensa contra los organismos de Derechos Humanos… y la lista se puede ampliar, pero sólo resaltaremos el último episodio de la serie, el protagonizado por Juan José Gómez Centurión, un militar carapintada que se alzó contra el gobierno constitucional del Dr. Raúl Alfonsín, que Macri designó al frente de la Aduana y que en un reciente programa de televisión se refirió al tema de los desaparecidos en sintonía con lo sostenido por

Juan José Gómez Centurión

Lopérfido y no sólo afirmó que en el país hubo una guerra contra el terrorismo sino negó que la dictadura hubiera seguido un plan sistemático de exterminio, como fue probado en todos los juicios y en todas las instancias judiciales, tanto en el país como en el mundo.

A pesar del repudio que merecieron tales expresiones, tanto Lopérfido en el gobierno de la CABA, como Gómez Centurión en el nacional, no fueron removidos y siguen en sus cargos.

Dime quienes son los funcionarios que respaldas y te diré quién eres.